versos para la lucha

Ellos tienen los fusiles nosotros tenemos el hambre
ellos tienen los psquiatras nosotros tenemos el miedo
ellos tienen el dinero nosotros tenemos la envidia
Piensan ellos nosotros pensamos
lloran ellos nosotros lloramos
ellos y nosotros juntos galopamos.

poema para cumple de Bego

Me enamora-mùsica de Lou Reed
que aùn tengas ojos para mì
cuando sè que es un calvario
el martirio blanco que dicen los santos.
fregar los platos
pregòn de amor,labor callada
la plancha
mañana,tarde y noche
entre pucheros dices "me muero" "te quiero"
hasta ahì la ama de casa
pero y dònde la esposa,dònde la madre
dònde el poema que te cante.
El corazòn me pierde
estoy en tus manos
creo en ti
te admiro,te amo
y te deseo feliz cumpleaños.
(Para Bego)

Steve Strongman - "Lets Sleep on This

dìa 50

Cristo olvidado
el Cristo del sagrario
en el hombre herido
en el hombre alienado
allì me estàs esperando
Cristo crucificado.

dìa 49

Tuve de niño
un balòn y mandarinas
ahora en mi pecho
anidan golondrinas.
Si dices quiza aguardo
noche y luna esperando
han de traerte las olas
a mis desnudos brazos.

dìa 48

Emerge el lìquen azul
en aguas càlidas del alma
trae noticias del triàngulo que sostiene
la vida de aquellos que intentaron en viajes exòticos
y ahora fuman en horas de trabajo
repitiendo como una letanìa
las mentiras de los payos.

dìa 47

Yo violo el candor de la rosa
con spray negro de turbulencias
templa las cuerdas del alma
vuelve luego
con siete estrellas a la rosa turbada
y en silencio tres pètalos arranca.

dìa 46

Camina como un àngel anònimo
lleva la flor del desencanto
prendida en el ojal de su chaqueta
burla a sus fantasmas
con cajas de dexedrina
suplica a la diosa belleza
una historia con risas,lluvia y ganas de vivir.

dìa 45

Nos amamos.
Te alejaste y te encontrè
en mis sueños
en mis deseos
en mis ojos
en mi ser
en los otros
en lo eterno
en el misterio
en el papel.
Te tuteo
sin miedo
poesìa desnuda
te quiero.

dìa 44

Saltè la cerca y corrì en pos de la cometa que Leviatàn maneja y cayò mi alma dislocada por el pecado.Vengo a encabestrillar mis làgrimas rojas y traer al Entrañable noticias de mi alma cautiva.

Un tìmido alboroto o màs bien pasarà,entre la hierba fresca,desapercibida,mi palabra hambrienta.

Aùn mejor,sino que
te besè.
Para con
aasì pues bèsame.

dìa 43

En Cristo derroto las horas urgentes y tornan a mì los panes y los peces
multiplicados por su solo poder y ronroneo en su regazo sabiendo que antes ha dejado en mi plato leche y miel.

dìa 42

Desayuno soledad con esperanza
y unas tortitas de miel
no hay valientes que manden rosas
voy a enchufar la caja tonta
y olvidar esta canciòn.

dìa 41

A la luz del alba eternos hermanos
anunciando en tierras extrañas
jirones de consuelo a quien sufre
de rutina y otros males
por una senda llena de peligros
y que nosotros seguimos
sin preocuparnos
de que prefieras a Barrabàs.

dìa 40

La camisa que me compraste por marzo
rota,todavìa la guardo
junto a risas,poemas y llantos.

dìa 39

Otoño traidor viene
a la sombra del ciprès
algùn dìa a Estrasburgo
hemos de volver.

dia 38

En buga dando tumbos,
camin de tu cieo jamaicano
nos acordamos Sanchez y yo
deante de un tablero
cualquier dia nos vemos

día 37

Canto a mi estrella de Oriente
canto a mi abrigo caliente
canto a mi vasija de agua
canto a mi pan de escanda
no canto suspiro
en tu oido la fragancia
de las gardenias que cultivo.

dìa 35

No miento,este es un verso
nacido del aburrimiento
su destino era el fuego
màs no he querido el infierno
para tal sentimiento
no todo son altos vuelos
incluso en estos pequeños
el alma encuentra un espejo
reflejos de hastìo y cansancio
transformados en flamenco:
la vida vivida como duelo
guitarra acompaña mi lamento.

dìa 34

Es mi amigo
el ruiseñor
alegra mis oìdos
con su dulce canciòn
Amiga mìa
la rosa
me regala su aroma
y se viste de pasiòn.
rosa y ruiseñor
el Señor los creò
honda pena sentìa
y Dios con ellos me consolò.

dìa 33

De congoja y pesar
el alma se llena
no mirèis ojos mìos
es la luna que pasea.
Antes fugitivo
ahora me veo preso
escuche Dios mi plegaria
cese mi tormento el cielo.

dìa 32

Las palabras mueren
cuando llegan al papel
cuando tù las lees
vuelven a nacer.